PARIS, 8 (ANSA) - Montañas de basura y latones rebosantes se
veían hoy en muchas calles de París, en el cuarto día de una
huelga de empleados de limpieza municipales que piden un aumento
de sus salarios. En cerca de un tercio de los barrios de la capital, aquellos
donde la recogida de basura está todavía gestionada totalmente
por el ente público y no por concesionarias privadas, los
habitantes expresaban su creciente malestar por la suciedad de
las calles y el mal olor, intensificado por la lluvia. "Apestan y desbordan por todas partes, seguramente no es una
buena imagen para los turistas", se quejaba a los micrófonos de
France Info el gestor de un café en el céntrico barrio de
Montorgueil. La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, espera confiada en una
solución del conflicto y prevé un regreso a la normalidad ya
mañana, gracias a la apertura de una mesa de negociaciones sobre
ascensos y aumentos de sueldo.
Y8K/ACZ
08/10/2015 16:31
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