(ANSA) - NUEVA YORK 25 ABR - La inmigración se convertirá en
una necesidad económica para los países más ricos que se
enfrentan al envejecimiento de la población, si quieren mantener
el crecimiento y cumplir los compromisos sociales con las
personas mayores, necesitarán trabajadores extranjeros, reportó
hoy el Banco Mundial (BM).
Ante el cambio demográfico, "durante la próxima década todos
los países encontrarán cada vez más necesaria la inmigración" y
esto requerirá políticas adecuadas para atraer talento".
Los diversos enfoques utilizados a nivel mundial hasta la
fecha han creado "grandes ineficiencias y oportunidades
perdidas" y, por lo tanto, deben recalibrarse, aseveró el
informe "World Development-Migration", de la institución de
Washington, que además observó cómo "los cambios demográficos
intensificaron la competencia global por trabajadores y
talentos".
En ese sentido, citó el caso de Italia, México y Nigeria
que, con sus fuerzas demográficas divergentes, son ejemplos de
tendencias globales.
Para Italia, el Banco Mundial prevé una reducción a la mitad
de la población a 32 millones de habitantes en 2100 y observa
una fuerte caída en la tasa de fertilidad, además de señalar
cómo la proporción de mayores de 50 años se ha más que
duplicado, del 21,5% en 1950 a 46,7% de 2022.
Italia -explicó el instituto- podría aumentar la
participación de las mujeres en la fuerza laboral para
satisfacer sus necesidades. Pero -añadió el Banco Mundial de
forma general- "los cambios tecnológicos, una mayor
participación laboral, las políticas de natalidad y las reformas
de las pensiones a menudo no son suficientes para los países de
renta media y alta".
En cuanto a las políticas de natalidad, el Banco Mundial
expresó sus dudas: "tienen un impacto relativamente limitado en
los países" y es poco probable que puedan revertir la tendencia
actual de declive demográfico "en el corto plazo".
De ahí el ejemplo de Italia, donde hay "2,4 millones de
niñas menores de nueve años. Cada una de estas niñas tendría que
tener 3,3 hijos si quisiéramos tener una generación tan grande
como la de sus padres", explicó el Banco Mundial, precisando que
para Italia se trataría de un fuerte aumento de la tasa de
fecundidad en comparación con el nivel actual.
"La migración puede ser una fuerza poderosa para la
prosperidad y el desarrollo. Cuando está bien gestionada, puede
ofrecer beneficios para todos", dijo Axel von Trotsenburg,
director general del Banco Mundial.
A su juicio, los países más pobres deben hacer que la
inmigración sea parte de su desarrollo estratégico.
"Y los países receptores deben presentarse como socios para
ayudar a capacitar, pero también para construir un consenso
político sobre el papel de los inmigrantes", completó. (ANSA).
Leggi l'articolo completo su ANSA.it
Banco Mundial, migrantes necesidad económica
"Italia puede aumentar la cuota de mujeres", afirmó informe