Se puso en marcha hoy el plan para reforzar la seguridad de Roma con vistas al feriado del 25 de abril, que conmemora la liberación del nazi-fascismo, con la máxima atención puesta en las comunidades judías y palestinas en la puerta de San Pablo.
Controles estrictos se han montado en la Porta San Paolo y en las zonas adyacentes y donde se desarrollarán las diversas iniciativas en recuerdo de la Liberación.
A las ocho de la mañana del jueves está prevista la colocación de una ofrenda floral por parte de la comunidad judía y, al mismo tiempo, estudiantes y movimientos palestinos se reunirán en la plaza Ostiense en la convocatoria "Por un 25 de abril antifascista y antisionista".
Las medidas se desarrollaron en un comité provincial de seguridad en la prefectura y en una mesa técnica en la comisaría. (ANSA).