(ANSA) - ROMA 28 MAR - En las aulas escolares "la mayoría de
los alumnos deben ser italianos": no más clases con demasiados
alumnos extranjeros. Los valores de la Constitución italiana
-cuya asimilación se construye una sociedad ordenada, de lo
contrario es un "crisol" - se pueden aprender más fácilmente si
los niños extranjeros "estudian intensamente el italiano si no
lo conocen bien, si se enseña en las escuelas en profundidad la
historia, la literatura, el arte, la música italiana, si los
padres también participarán en el aprendizaje de la lengua y la
cultura italiana, de lo contrario vivirán en comunidades
separadas".
De ese modo, razona el ministro de Educación de Italia,
Giuseppe Valditara, después de que 24 horas antes el viceprimer
ministro Matteo Salvini, líder de la Liga y socio de su partido,
había dicho que consideraba el cierre de una escuela por Ramadán
como "un retroceso" y había propuesto la cuota máxima del "20%
de niños extranjeros en una clase".
El ministro de Transportes e Infraestructuras se refiería
al cierre, el 10 de abril, día del fin del Ramadán, del
instituto Iqbal Masiq de Pioltello, en la región de Milán, en el
centro de una tormenta mediática. Palabras, las de Salvini y
Valditara, que llegan entre otras cosas después de que el
presidente de la República, Sergio Mattarella, expresara su
agradecimiento por el trabajo que el profesorado y los órganos
del instituto de la escuela de Pioltello realizan "en el
cumplimiento de una tarea preciosa y particularmente
desafiante".
"Y si la mayoría apoya las declaraciones del Ministro de
Educación, hay que exorcizar el riesgo de los banlieu y de
Molembeek (varios periféricos de extranjeros en París y
Bruselas, NDR), porque la cultura de la intolerancia nace en los
guetos urbanos", afirma Fabio Rampelli y en esto también está de
acuerdo Maurizio Gasparri, hombres del Partido Demócrata (PD),
en línea con las críticas que nacen en el partido opositor.
Según la secretaria, Elly Schlein, Valditara "corre tras el
delirio de Salvini, que quiere sacar de clase a los niños
nacidos de padres extranjeros". "No entendemos la furia de la
derecha que gobierna contra los niños. Creen que esos foráneos
están negando el derecho constitucional a la educación para los
nacidos y criados en Italia?", observa la dirigente opositora.
El comentario publicado en la cuenta de los diputados del
Partido Demócrata bajo la publicación del ministro es irónica:
"Ministro, ahora reescríbalo en italiano. Así, tal vez, podamos
entender exactamente lo que dijo".
La propuesta del ministro también fue rechazada por el FLC
CGIL (sindicatos de educación): sería "una idea fuera de tiempo"
para Gianna Fracassi, secretaria general del gremio, "una
disposición que no tendría en cuenta la composición de la
sociedad actual y la función unificadora de la escuela en
absoluto".
En realidad, en Italia ya hace tiempo que existe un límite
en el número de estudiantes extranjeros por clase. Según una
circular de enero de 2010 del Ministerio de Educación, entonces
dirigido por Mariastella Gelmini, el número de estudiantes
extranjeros con un conocimiento reducido de la lengua italiana
no debe exceder el 30% de los matriculados en cada clase y en
cada escuela, incluso si puede haber excepciones.
En el año escolar 2021/2022, el 7,2% de todas las escuelas
de Italia tenían más del 30% de estudiantes extranjeros,
mientras que las escuelas sin extranjeros eran el 18%, con
grandes diferencias entre regiones: la que tiene el mayor
porcentaje de escuelas sin extranjeros estudiantes es Cerdeña,
mientras que en el norte el porcentaje de clases superiores al
30% es especialmente alto en Lombardía, Emilia Romagna y Véneto.
Hay escuelas, "sobre todo en las zonas suburbanas", donde
"la población extranjera suele alcanzar y superar el 50%",
observa el secretario lombardo de la UIL Scuola, Abele Parente.
Y para el alcalde de Florencia, Dario Nardella, "si realmente es
idea de Salvini, expulsar a los niños y niñas extranjeros de las
escuelas, creo que no conoce el verdadero país". "Los expulsamos
de las escuelas y dónde enviarlos? Todos a casa de Salvini?",
completó irónico. (ANSA).
Leggi l'articolo completo su ANSA.it
Más polémicas por los estudiantes extranjeros
Ministro: "La inclusión no es un crisol de culturas"