(ANSA) - SAN PABLO, 04 MAG - Jair Bolsonaro, el expresidente
brasileño de derecha que es objeto de una investigación sobre la
falsificación de certificados de vacunación contra el covid,
lloró en la televisión. La nueva causa judicial que le ha
llovido al excapitán del Ejército pone en entredicho su
posibilidad de salir del país, luego de que el juez Alexandre de
Moraes autorizara la incautación de su pasaporte.
La investigación que, con la ejecución de seis órdenes de
prisión preventiva y 16 órdenes de allanamiento (también en la
casa del exmandatario) involucra a personajes del entorno de
Bolsonaro, en "una asociación delictiva para delitos de
manipulación de datos falsos de vacunación en el Ministerio de
Salud", asestó un duro golpe a la imagen del exjefe de Estado.
Bolsonaro, que se declara completamente ajeno al asunto,
estudia ahora su línea defensiva para trasladar las
responsabilidades a sus colaboradores, en particular al
incondicional teniente coronel Mauro Cid, que acabó en prisión
preventiva junto a los ex asesores Max Guilherme y Sergio
Cordeiro.
La tesis de la fiscalía es que algunos datos de su pase
Covid fueron falsificados para permitir que el exjefe de Estado,
que no estaba vacunado, pudiera ingresar a los Estados Unidos el
30 de diciembre del año pasado (donde permaneció tres meses),
dos días antes de la toma de posesión de Luiz Inácio Lula da
Silva.
De la lista proporcionada por los Centros para el Control y
la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos surge que
las "personas en viajes diplomáticos u oficiales de gobiernos
extranjeros" eran exceptuados de las exigencias Lo que se busca
determinar es si Bolsonaro, que en ese momento todavía tenía
visa diplomática A1, estaba incluido en esa categoría.
Según observadores, el expresidente, en el centro de decenas
de investigaciones, enfrenta un duro escenario judicial
judicial, que casi inevitablemente le costará la inhabilitación
y no excluye el riesgo de prisión.
Mientras tanto, el líder del partido ultraderechista
portugués Chega, André Ventura, anunció la decisión de aplazar
la cumbre mundial de la derecha, prevista inicialmente en Lisboa
para los días 13 y 14 de mayo, "por respeto a Bolsonaro y su
entorno, a quien fue impedido de viajar por el estado
brasileño", acredita en el papel de víctima del exmandatario y
habla de "acoso". (ANSA).
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Otra vez en la mira de la justicia, llora en TV
Juez autoriza el secuestro de su pasaporte