Economía

Italia busca acelerar la producción de autos

Ministro Urso mantiene conversaciones con Tesla, abierto a más acuerdos

Redazione Ansa

(ANSA) - ROMA - Para aumentar la producción de vehículos en Italia "hemos iniciado conversaciones con productores de varios países, no solo orientales, sino también occidentales". Con Stellantis no es suficiente, por lo que el gobierno quiere añadir un segundo fabricante de automóviles a las históricas fábricas de Fiat. Y este podría ser Tesla.
    Así lo afirmó el ministro de Empresa y Made in Italy, Adolfo Urso, en una audiencia en la Comisión de Actividades Productivas de la Cámara, donde contó sobre un diálogo con la empresa de Elon Musk que se prolonga "desde hace meses".
    El objetivo es producir en Italia un millón y 300 mil vehículos, entre autos y medios comerciales.
    Este es el umbral identificado por el gobierno como necesario para las necesidades del mercado interno y de las más de 5.500 empresas de la amplia cadena de suministro de componentes, que emplean a 1,2 millones de personas.
    En particular, se están llevando a cabo investigaciones con tres empresas chinas de automóviles eléctricos, que visitaron Italia, tras una misión del ministerio de Economía en su país, con vistas a posibles acuerdos.
    La oposición acusó al ministro de "contradicciones" en su enfoque sobre los coches eléctricos, y el exministro Andrea Orlando (Partido Demorático, PD) y la diputada Chiara Appendino (del Movimiento 5 Estrellas, M5S) hablaron de un "descorazonador cortocircuito" también en las relaciones con China, tras la despedida de la Ruta de la Seda.
    El acuerdo en el que se está trabajando con Stellantis, que Urso confía en cerrar antes del verano, pretende alcanzar una producción de un millón de vehículos en unos pocos años, frente a los alrededor de 750.000 del año pasado.
    Por lo tanto, según el ministro, se necesita "al menos" un segundo productor. Los nombres que circulan son el del gigante chino BYD, para una posible segunda planta europea después de la de Hungría, como afirmó el martes el director general Michael Shu, pero también Chery, Leapmotor, Toyota y, efectivamente, Tesla.
    "Hemos iniciado conversaciones con productores de varios países, no sólo orientales sino también occidentales", afirmó el ministro, recordando que en los últimos días "en Alemania han rechazado un plan de expansión masiva para la planta de ensamblaje europea de Tesla y esto seguramente conducirá a un grupo decisión".
    "Estamos recibiendo comentarios muy positivos, pero es un proceso continuo que requiere precaución", añadió.
    La investigación de la Comisión Europea sobre los vehículos eléctricos chinos también juega un papel a favor de instalarse en un país europeo como Italia, lo que podría dar lugar a un aumento de los aranceles.
    "Las casas automovilísticas que actualmente no producen en Europa -afirmó Urso- miran con interés nuestro mercado, conscientes de que, como indicó el propio presidente (Mario) Draghi, necesariamente tendremos que proteger el mercado interior de la competencia".
    Mientras tanto, en las negociaciones con Stellantis, el ministro registró pasos hacia adelante: "Con las declaraciones de los últimos días - dijo - la narrativa del grupo cambió un poco, pero no es suficiente para nosotros. Somos un gobierno que mira los hechos". (ANSA).
   

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