SANTIAGO DE CHILE, 26 (ANSA) - Unos 167 millones de
latinoamericanos y caribeños se encontraban en situación de
pobreza en 2014, de los cuales 71 millones sufren de extrema
pobreza o indigencia, según el Panorama Social de la Comisión
Económica Para América Latina y el Caribe (Cepal), divulgado
hoy.
De acuerdo al estudio, la reducción de la pobreza se estancó
en torno al 28%, nivel conseguido en 2012, mientras que en ese
mismo período la indigencia aumentó de 11,3% a 12,0%, todo ello
en un contexto de desaceleración económica
Pese a la falta de progresos en el promedio regional, cinco
de los 12 países con información disponible al 2013 registraron
disminuciones de la pobreza por ingresos superiores a un punto
porcentual por año. Los países que mostraron mayores descensos
fueron Paraguay (de 49,6% en 2011 a 40,7% en 2013), seguido por
El Salvador (45,3% en 2012 a 40,9% en 2013), Colombia (32,9% en
2012 a 30,7% en 2013), Perú (25,8% en 2012 a 23,9% en 2013) y
Chile (10,9% en 2011 a 7,8% en 2013). Sin embargo, esta edición del Panorama Social incorporó una
visión multidimensonal de la pobreza que incluye vivienda,
servicios básicos, educación, empleo y protección social, y
estándar de vida (referido a los ingresos monetarios y la
posesión de bienes duraderos). Una persona es pobre si tiene
carencias en más de una de estas dimensiones, dice la Cepal.
Con este indicador, entre 2005 y 2012 la incidencia de la
pobreza multidimensional se redujo, como promedio para 17 países
de la región, de 39% a 28% de la población, cifras similares a
las de la pobreza por ingresos. En todos los casos se
registraron caídas en esta medición y los mayores descensos se
produjeron en Argentina, Uruguay, Brasil, Chile y Venezuela. Para el organismo de Naciones Unidas, "más allá de los
avances logrados en la última década, la pobreza persiste como
un fenómeno estructural que caracteriza a la sociedad
latinoamericana. Los datos de 2013, que reflejan un contexto de
desaceleración de la economía regional que viene ocurriendo
desde 2010, dan cuenta del estancamiento de la tasa de pobreza
por ingresos en la región desde 2011 e indican que la tasa de
pobreza y la tasa de indigencia se mantuvieron sin diferencias
significativas con respecto a los niveles observados en 2012". En cuanto a la desigualdad, la tendencia a la disminución de
las disparidades se aceleró a partir de 2008, sobre todo en
Bolivia, Uruguay, Argentina, Brasil, México y Colombia. En
cambio, Costa Rica registró una leve mejora entre 2002 y 2008 y
un marcado proceso de concentración entre 2008 y 2013, a tasas
superiores al 1% anual. Para la secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, "la
recuperación de la crisis financiera internacional no parece
haber sido aprovechada suficientemente para el fortalecimiento
de políticas de protección social que disminuyan la
vulnerabilidad frente a los ciclos económicos. Ahora, en un
escenario de posible reducción de los recursos fiscales
disponibles, se requieren mayores esfuerzos para apuntalar
dichas políticas, generando bases sólidas con el fin de cumplir
los compromisos de la agenda de desarrollo post-2015". Junto a los capítulos de pobreza y desigualdad, el Panorama
Social incluyó tres aspectos cruciales de la agenda sobre la
juventud y el desarrollo en la región. En el capítulo cuarto se
centró sobre las diferencias de género y trabajo. En el apartado quinto, analizó la segregación residencial y
cómo refleja desigualdades socioeconómicas, étnicas y de
nacionalidad. Se presenta información sobre una veintena de
grandes urbes pertenecientes a diez países de la región. En este
fenómeno también opera como variable intermedia la migración
interna, incluida la intrametropolitana, cuyo impacto sobre la
segregación residencial y el paisaje social de las ciudades se
calcula considerando sus efectos sobre la composición etaria y
educativa y el denominado "efecto vecindario". Por último, el capítulo sexto aborda el Gasto Social de los
países.
MBA/MRZ
26/01/2015 18:31
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