Por Silvana Bassetti
GINEBRA, 5 (ANSA)- La ONU acusó hoy a la Santa Sede de
haber violado la Convención Internacional de los Derechos del
Niño y le pidió, en un documento de insólita dureza, revisar su
postura sobre el aborto y la anticoncepción, remover a los curas
pedófilos, evaluar el número de niños nacidos de curas católicos
y apoyar la despenalización de la homosexualidad. Con sorpresa, el Vaticano replicó que examinará
cuidadosamente el documento con las recomendaciones difundido
por el Comité de la ONU sobre los Derechos del Niño, pero
criticó su línea ideológica y su intención de "interferir
en la enseñanza de la Iglesia Católica". Desde Ginebra, el Comité exhortó al Vaticano a "revisar
su postura sobre el aborto" cuando está en riesgo la vida y
la salud de las mujeres embarazadas, y le pidió "identificar
circunstancias en que pueda ser admitido el acceso a los
servicios de aborto", modificando el canon 1398 en la materia. "Con profunda preocupación" citó las sanciones decididas
por la Iglesia en 2009 en Brasil contra una madre y un médico
que practicó el aborto para salvar la vida a una niña de 9
años, embarazada tras ser violada por su padrastro. El Comité también pidió la remoción de su cargo de quienes
hayan cometido o sean sospechosos de haber cometido abusos
sexuales contra niños, porque hasta ahora la Santa Sede "adoptó
políticas y prácticas" que llevaron a continuar los abusos con
impunidad para los autores.
El organismo de la ONU se dijo "seriamente preocupado" por el
hecho de que la Santa Sede "no haya reconocido el alcance de los
crímenes cometidos, no haya tomado las medidas necesarias para
afrontar los casos de abusos sexuales contra niños y para
proteger a los niños". Además, "adoptó políticas y prácticas" que llevaron a la
continuación de los abusos y a la impunidad de los autores". Las advertencias de la ONU se conocieron a seis días del
primer aniversario de la renuncia del actual papa emérito
Benedicto XVI, el 11 de febrero del 2013, reemplazado por el
argentino Jorge Bergoglio, el papa Francisco. Precisamente
Francisco creó el año pasado una comisión especial para la
protección de los menores víctimas de abusos sexuales y para la
lucha contra los curas pedófilos. La comisión fue creada por
consejo de los ocho cardenales que lo asesoran para la reforma
de la Curia Romana. Las acusaciones y recomendaciones de la ONU figuran en las
observaciones finales del informe realizado por el Comité tras
examinar el documento de la Santa Sede sobre su respeto a la
Convención Internacional sobre los Derechos del Niño. El Vaticano -dijo la presidenta de la Comisión, Kirsten
Sandberg- violó la Convención Internacional de los Derechos del
Niño. Respondiendo a una pregunta sobre si el informe muestra
que la Santa Sede violó la Convención, Sandberg afirmó: "Mi
simple respuesta es sí, porque no hicieron todo lo que
habrían debido". Asimismo, exhortó a la Santa Sede a "evaluar el número de
niños nacidos de curas católicos, descubrir quiénes son y tomar
todas las medidas necesarias para garantizar los derechos de
estos niños a conocer y ser cuidados por sus padres". En su informe, el Comité recomienda que la Santa Sede ponga
fin a la práctica de los "acuerdos de reserva" en el ámbito de
los planes de apoyo financiero para las madres. En otro tramo del documento invitó a la Santa Sede a "hacer
pleno uso de su autoridad moral para condenar todas las formas
de molestia, discriminación o violencia contra los niños según
su orientación sexual o la orientación sexual de sus padres, y
a apoyar los esfuerzos internacionales para la despenalización
de la homosexualidad". Aunque considera positivas las afirmaciones del papa
Francisco en julio de 2013, el Comité está preocupado por
dichos pasados de la Santa Sede sobre la homosexualidad que
"contribuyen a la estigmatización social y a la violencia contra
gays, lesbianas, bisexuales y adolescentes transgénero y niños
criados por parejas del mismo sexo". También recomendó a la Santa Sede retirar de su legislación,
como anunció oralmente, la expresión discriminatoria "hijos
ilegítimos" para los niños nacidos fuera del matrimonio. El documento también manifiesta "seria preocupación" por las
consecuencias negativas de la postura de la Santa Sede sobre el
acceso de los adolescentes a la anticoncepción. Por ello recomienda al Vaticano poner el interés superior
de los adolescentes en el centro de todas las decisiones en la
materia, y a garantizar que la educación sobre salud sexual y
prevención de VIH/sida sea parte del currículum obligatorio
en las escuelas católicas.
Y4Y-RF/MRZ
05/02/2014 19:37
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